Según Marcelo Cervantes, ingeniero meteorólogo de la UNALM, el evento se originó en la alta atmosfera (5000 hasta próximamente los 12000 metros sobre el nivel del mar) por la interacción de dos factores. El primero de ello se le denomina Depresión Aislada de Niveles Alto (D.A.N.A.), que se dirigía desde el océano pacifico hacia el continente y que fue comunicado desde el día 21 de mayo mediante la página aviso del SENAMHI.

No obstante, ha ocurrido algo muy interesante, en el mismo nivel altitudinal existen vientos que sobrepasan la velocidad de 30 m/s, también denominados Jet Streams o corrientes en chorro. Había dos sistemas ubicados a los 12° y 24° sur, respectivamente. La imagen de las 7:00 am, se verifica que estos Jets se “fusionaron” formando un canal de vientos en alta atmosfera abarcando ambos extremos del territorio peruano. Es decir, este sistema apareado atrapo y elevo a la D.A.N.A. hacia arriba propiciando como dirían el termino técnico “divergencia en altura”. Como la D.A.N.A. traía consigo alta humedad del norte propició la saturación (formación sistemas de nubes de mal tiempo) y finalmente con el acenso violento del aire se produjeron todos los eventos típicos con las tormentas. Este evento, sin embargo, no tuvo una duración mayor a los 40 minutos y se fue desplazando hacia el sureste.

UNALM EN LOS MEDIOS

La Dra. Victoria Calle, investigadora y docente de la Facultad de Ciencias de la UNALM declaró para el diario “El Comercio”, al cual explicó las denominaciones de los tres elementos observados aquella mañana en nuestra capital: el rayo, que es una descarga eléctrica de gran intensidad, la cual tiene su origen a través del encuentro de dos cargas contrarias (positivas y negativas). «Puede producirse en el interior de una nube, entre varias de estas y entre una nube y la superficie terrestre” afirmó. Luego, se refirió al relámpago, como resplandor generado por la descarga y al trueno, que es el sonido producido. Estos dos dan lugar al rayo.