El evento organizado por la UNALM se sumó a la causa de las Naciones Unidas de contribuir con el sexto objetivo del desarrollo sostenible con miras al 2030, el cual busca lograr al acceso mundial y equitativo del agua potable para toda la población, mejorar la calidad del agua reduciendo la contaminación, aumentar el uso eficiente de los recursos hídricos en todos los sectores, asegurar su sostenibilidad y proteger y restablecer los ecosistemas relacionados con el agua

El foro contó con 5 conferencias a cargo de los representantes de instituciones que trabajan con el recurso hídrico: la Autoridad Nacional del Agua (ANA), el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego, SEDAPAL, Southern Perú y el Ministerio de Vivienda. Dichas conferencias tocaron temas de suma relevancia referente al uso y conservación del agua, como el régimen económico del agua en el Perú, el programa Sierra Azul, la gestión del agua para la población de Lima frente al cambio climático, la valoración del agua en la minería y el saneamiento del agua.

Situación actual del agua y aportes de la UNALM

El Decano de la Facultad de Ingeniería Agrícola, el Dr. Abel Mejía, durante sus palabras de inauguración, dio cuenta de la problemática del agua en nuestro país y sobre la importancia de tomar conciencia sobre su uso: “Sabemos que estamos en una época difícil por el COVID-19 y estamos aprendiendo que el agua es un arma fundamental para frenar al coronavirus y otras enfermedades infecciosas; sin embargo, esta pandemia nos ha evidenciado la vulnerabilidad de este recurso, porque más de 3 millones de personas no tienen acceso directo al agua en estos momentos”.

La culminación de las ponencias dio pase al discurso de clausura del Rector de la UNALM, el Dr. Américo Guevara, quien se dirigió a todos los asistentes dando a conocer el aporte de La Agraria respecto a la problemática de amenaza extrema en la que se encuentra el recurso hídrico. El Rector dijo que la universidad se encuentra activamente trabajando para optimizar el uso eficiente del agua y la satisfacción de las necesidades en un marco de desarrollo sostenible. Asimismo, propuso fomentar y fortalecer políticas para una gestión eficaz, defensa y protección de este recurso para el país; recomendó la sinergia de universidades para seguir informando y construyendo propuestas para la defensa del agua, así como seguir concientizando a los ciudadanos a base de investigación científica sobre su conservación, pues como dijo: “Este elemento juega un papel fundamental en la vida de miles de millones de personas al incidir en aspectos que afectan a la seguridad alimentaria y energética, la salud humana y al medio ambiente”.