Chahuas señaló que posponer las actividades juega en contra de la productividad y el aprendizaje. Para ello, brindó algunos consejos: pautear una o varias tareas en una agenda y trabajar cada una por 20 minutos intensamente y descansar 5 minutos; enfocarse máximo 40 minutos en un objetivo y luego empezar otro; y eliminar las distracciones como el celular o las redes sociales.
Trabajar periodos cortos e intensos, alternar los descansos y las materias que se viene desarrollando incrementa la productividad. Además, programar a la mente de que trabajará intensamente y recompensarlo te permite incentivarte y proponerte más objetivos.
Para el taller “Manejo del estrés”, dirigido por el psicólogo Jhony Atencio, los estudiantes aprendieron a como realizar estiramientos para liberar la tensión en el cuello, nuca, hombros y espalda.
Algunos de los participantes manifestaron sentirse con ansiedad, cambios en el patrón del sueño y en sus hábitos diarios. Atencio mencionó que los problemas de insomnio y sueño provocados por la cuarentena y el miedo que ha llegado junto al COVID-19, causan un cambio en el reloj biológico de las personas, y esto afecta su estado físico y mental.
Asimismo, se recomendó continuar con horarios que nos permitan descansar y dedicar tiempo para uno mismo, practicar la meditación desde casa y realizar técnicas de automotivación como el abrazo a uno mismo, y alimentar a la mente con palabras maravillosas. “Mírate frente al espejo y repítete: Cada día de mi vida me siento inmensamente feliz, por mis arterias y venas corre sangre y oxígeno, sinónimo de vida de motivación y entusiasmo.” |