DISCURSO DEL DR. ABEL MEJÍA MARCACUZCO - RECTOR



Señor Doctor Robert Benfer, Señores Vice Rectores, Señores Decanos, Señor Director de la Escuela de Post Grado, Señores Profesores, Distinguidos invitados.

En esta ocasión nos convoca un acto académico de gran significado para toda la Universidad, el de investidura de Doctor Honoris Causa.

Quisiera brevemente reflexionar cómo nace en las universidades este reconocimiento que es por “Causa de Honor”, expresión latina que resume en el Honor, la virtud, y el mérito las acciones de que trascienden a las personas, familias o instituciones.

En el desarrollo de la humanidad hay dos establecimientos que han perdurado en el tiempo, una ha sido la iglesia y otra la universidad. La primera actuando sobre el espíritu y la fe, la otra sobre el conocimiento, la ciencia y la verdad. En ese largo camino, se ha ido reconociendo el valor del conocimiento, del develamiento del arte y la elevación del espíritu. La Universidad es depositaria de todo ese proceso de creación humana y por eso es que esta institución tiene la capacidad de reconocer el quehacer creativo, científico y humanístico de las personas.

En esta ocasión estamos reconociendo al Dr. Robert Benfer, por su conspicua y prolífica labor como científico en las áreas de antropología y arqueología, campos en los que nuestra universidad no forma académicamente sino reconoce el gran valor  que tienen estas disciplinas en el desarrollo humano.

Uno de los grandes aportes de las investigaciones del Dr. Benfer fue ayudar a aumentar el conocimiento sobre las culturas peruanas en general y en especial las de la costa central, como son la cultura Chilca y las que se desarrollaron en los valles de Chillón y Casma. Estos hallazgos logrados por el Dr. Benfer nos permiten hoy saber cómo se instauraron los primeros asentamientos humanos en esos lugares, cómo se surgió la agricultura y la alimentación y la manera en que se alcanzó desarrollo en la economía dual, que articulaba actividades como la pesca y la agricultura. Cabe destacar que uno de los mayores aportes del Dr. Benfer está centrado en un periodo poco estudiado por los investigadores peruanos: el pre-cerámico.

Esta labor de investigador de nuestro país, la inicia el Dr. Benfer en el año de 1976 y la continúa hasta hoy con grandes aportes recientes, como el estudio de las observaciones astronómicas que los antiguos peruanos realizaron en la costa peruana para conocer y predecir los cambios climáticos y su influencia en la agricultura. Hoy sabemos y reconocemos la importancia que tienen los conocimientos y las técnicas desarrolladas por nuestros antepasados, para un manejo mejor de los recursos que la naturaleza nos brinda, permitiendo así la adaptación de las plantas a los diferentes climas y microclimas. Hoy reconocemos el valor de las técnicas agrícolas que se desarrollaron en el pasado como los Huachaques, los Waru Warus o las Amunas. Pero también nos damos cuenta del peligro que los cambios climáticos observados en la actualidad entrañan para países tan ricos y diversos en su cultura y su naturaleza, como es el nuestro.

Para sociedades tan antiguas como la peruana, el conocimiento generado en el pasado, y que explica nuestro presente, nos permite proyectarnos al futuro con esperanza y confianza, pues reconocemos que nuestra identidad cultural que hunde sus raíces en más de 10,000 años de antigüedad, es también un gran valor en esta era de la globalización.

Un segundo aspecto que quisiera destacar, además de los merecimientos académicos y científicos del Dr. Robert Benfer es su estrecha y larga vinculación con nuestra Universidad. El Dr. Benfer llega a nuestra institución invitado por el Dr. Frederic Engel en el año  de 1976. Sabemos que el Dr. Engel fue uno de los pioneros en las investigaciones arqueológicas de las épocas del pre-cerámico en la costa peruana, desde la década de los años 60 y a quien debemos la creación de nuestro Museo inicialmente denominado de Antropología y Agricultura Pre-hispánica y hoy constituido como el Museo Nacional de Antropología, Biodiversidad, Agricultura y Alimentación (MUNABA). Esta fructífera amistad del Dr. Benfer con el Dr. Engel, en todos los campos, hizo posible que las investigaciones arqueológicas que se impulsaron desde aquella época continúen hasta hoy día.

De esta permanente labor de investigación del Dr. Benfer quiero destacar algo muy especial: su profunda pasión y amor por la cultura peruana, que lo ha llevado a superar un sinnúmero de dificultades, como limitaciones en recursos económicos y dificultades en las labores de campo, donde la incomprensión de algunos poseedores de tierras en zonas arqueológicas crean obstáculos sin entender la importancia de sus estudios para la protección de nuestro patrimonio.

Esta pasión y amor del Dr. Benfer por el Perú, me hace recordar a algunos grandes investigadores del pasado peruano que vinieron desde tierras lejanas a nuestro país y se entregaron con pasión al develamiento de nuestro pasado como fueron Max Hule, Heinch Brunning, Richard Shadel, entre otros.

El gran esfuerzo emprendido por el Dr. Benfer y sus colaboradores, ha servido para entender la importancia de preservar nuestro patrimonio y continuar con las investigaciones en el nuevo Museo Nacional de Antropología, Biodiversidad, Agricultura y Alimentación (MUNABA) que se construirá en el campus de nuestra Universidad el próximo año.

Gracias al trabajo pionero del Dr. Benfer en el campo de la antropología y la arqueología, hoy podemos  valorizar el continuo proceso de desarrollo de la cultura peruana. Por ello hoy día, Dr. Benfer, reciba usted esta alta distinción, y haga extensivo nuestro  reconocimiento y agradecimiento a su familia, que hoy nos acompaña.

Muchas gracias.

Jesús Abel Mejía Marcacuzco
Rector