DISCURSO  DEL  SEÑOR  RECTOR
PROMOCIÓN 2O1O-II  “JOSÉ MARÍA ARGUEDAS

Sr. Dr. Jorge Aliaga Gutierrez; Vicerrector Acadénico
Sr. Mg. Efraín Malpartida Inouye; Vicerrector Administrativo
Sr. Dr. Felix Camarena Mayta; Director de la EPG
Señores Decanos, Señores Graduandos, docentes e invitados todos

Me complace mucho darles hoy la bienvenida a esta ceremonia de  graduación en que se reciben 267 bachilleres a nivel de pregrado y 6 a nivel de postgrado, Promoción 2010-II “José María Arguedas Altamirano”, en el año que celebramos el centenario del nacimiento de este gran escritor, antropólogo, insigne y noble profesor molinero, persona humilde, de corazón valiente y luchador que batalló incansablemente por lograr el reconocimiento de la interculturalidad peruana, donde con el mayor respeto y consideración puedan integrarse todas las sangres en el país.

Nos sentimos muy honrados cuando ustedes llegaron hace unos años a la universidad, por su confianza depositada en nosotros para administrar el patrimonio más valioso que existe que son los años de vida. Casi cualquier bien o servicio puede ser devuelto si no funciona, pero los años de vida que ustedes invierten en su carrera no pueden ser devueltos. Por eso es que nos sentimos tan responsables. Esperamos que hayan disfrutado y aprovechado su tiempo con nosotros. Que recuerden todo lo bueno y olviden gradualmente lo que los pueda haber frustrado. Sepan que en la universidad no sólo aprenden los alumnos, sino también los docentes y las autoridades y nos comprometemos a que ese aprendizaje permita una mejor educación para cada nueva generación.

¿Qué significa la graduación? ¿Por qué es tan importante?. Este momento inolvidable es la culminación de una meta en su educación. Es un día que transforma la relación de cada uno de ustedes graduados con la sociedad. A partir de ahora ya no es la Universidad Agraria sino la sociedad que los va a evaluar a ustedes como profesionales y como individuos, a través de sus actitudes, de su conducta y de su performance.

Quisiera invitarlos a pensar qué se están llevando de la universidad no sólo una certificación, una licencia para ejercer una profesión. Se están llevando algo más trascendente y más insustituible que es el conocimiento. Piensen en el valor del conocimiento; el conocimiento no les puede ser nunca sustraído. Es algo personal, inherente a cada uno de ustedes, que nunca nadie les va a poder sustraer. Algo que les permitirá alcanzar su realización como personas libres y autónomas, capaces de conquistar su lugar en la sociedad, ganarse la vida y reafirmar su identidad. Les podrán prohibir ejercer una profesión o poner condiciones, pero nunca les van a poder sacar ese conocimiento adquirido, siempre va a ser de ustedes. Este valioso bien que los distingue como personas tiene esa característica maravillosa que podemos compartirlo y en el acto de compartirlo, no estamos perdiendo nada de él, por el contrario lo seguimos fortaleciendo. Los que investigan comparten ese conocimiento; los que enseñan están formando sus futuros competidores; los propios estudiantes colaboran con la universidad buscando mejorar los procesos de aprendizaje, sabiendo que van a beneficiar a los que vienen atrás y no a ellos mismos.

"Ya con dos años en el cargo de rector de la Universidad Nacional Agraria La Molina, durante los cuales he tenido la oportunidad frecuente de interactuar con muchos de ustedes, de conocer sobre sus dudas, sueños, inquietudes y esperanzas; incluso de enseñarles a algunos en clase, voy a atreverme, en esta ocasión, algunas recomendaciones, más de maestro y amigo mayor y menos de rector:

Ustedes pertenecen a una generación de aparatos y conexiones: televisor cable, celulares, computadoras, laptops, Internet. Con todas estas herramientas, ustedes pueden acceder y bajar de la red abundante información y conocimientos sobre muchas disciplinas. Pero las cualidades que van a requerir, por ejemplo, para ayudar efectivamente a un amigo en un momento difícil o para imaginar un descubrimiento o innovación en los proyectos en los que se vayan a comprometer, todavía hay que ganarlas a pulso. De la Internet, no se puede "bajar" ni "descargar" inteligencia, ni pasión, ni creatividad, ni sabiduría. Esas cualidades hay que cultivarlas a la antigua: reflexionando, conversando, estudiando, viajando, visitando y conociendo más lugares. Vean menos televisión, lean más libros.

Ejerzan su profesión con integridad moral y ética. Nuestro país ha sufrido mucho por profesionales que perdieron la brújula moral y debemos ayudar a nuestra sociedad a recuperarla, dejen muy en alto el nombre de su universidad.

Recuerden que el conocimiento que tienen hoy va a "obsolescer" rápidamente. Albert Einstein en una de sus clases de física en Princeton anunció a sus alumnos que el examen que iba a plantear sería el mismo que el del año pasado y que estaba disponible en la biblioteca y cuando uno de los estudiantes le preguntó si no estaba preocupado porque alguien pueda ir y verlo. "Para nada", dijo Einstein, "las preguntas son siempre las mismas, lo que cambian son las respuestas". Ténganlo en cuenta. Mantenerse actualizados es su gran responsabilidad para la sociedad a la que van a servir.

Tener en cuenta la importancia de combinar la búsqueda del éxito privado con el bien público; esto se interpreta como la ayuda al prójimo, y la búsqueda del bien común. No existe realmente la salvación individual.

Debemos ayudar a dirigir al país en una dirección de creatividad e inteligencia, en donde el crecimiento y la igualdad no sean opciones excluyentes, sino resultados complementarios que se refuercen mutuamente. Hagamos una sociedad en la cual el talento y la dedicación sean más importantes que la afiliación política o el origen geográfico o social. Todos ustedes tienen el potencial de ser libres e innovadores. No tenemos por qué optar entre estado y sociedad civil, entre campo y ciudad o entre empresarios y trabajadores. El Perú necesita de todos.

No sigan los sueños de otros sino los propios y por sobre todas las cosas les pido: sigan siendo parte de la familia Molinera.

Todos ustedes, adquirieron nuevos conocimientos y capacidades, herramientas y tecnologías, estando preparados para emprender compromisos profesionales en el espacio más exigente del mundo real. Asuman el liderazgo, donde los miembros de la tripulación lo perciban con la autoridad suficiente, que puedan confiar en vuestro saber, talento y voluntad de servicio. De esta manera, dejarán una huella positiva en la comunidad, a quienes sirven. 

No quiero pasar por alto el deseo de expresar la más cálida felicitación a los padres, parientes y amigos de los flamantes graduados, porque graduarse es un trabajo de equipo. Porque nada puede hacerse si el estudiante no se esfuerza, pero tampoco él puede llegar hasta el final de una carrera, si no está apoyado moral, afectiva y financieramente por la familia. Hoy es el día para que todos los graduados aquí presentes agradezcan la comprensión brindada por todos los que hoy los rodean.

Finalmente, señores graduandos, en la víspera del festejo por el día del docente universitario, preserven un especial agradecimiento a vuestros mentores, capacitados profesores que los han guiado en la aspiración de culminar, responsablemente, sus trabajadas carreras universitarias. Igualmente, recuerden que tienen en el campus centenario un lugar entrañable al que siempre podréis regresar y donde se os recibirá con respeto y mucho cariño. Instándolos a que procuren fomentar el desarrollo de sinergias en la Agraria de La Molina, así, honrarían el competitivo potencial de nuestra querida alma mater.  

Muchas gracias.

La Molina, viernes 08 de julio del 2011

Dr. Jesús Abel Mejía Marcacuzco
Rector