Señor Vicerrector Académico, Doctor Jorge Aliaga La designación “De bonus ad melior” en idioma latín, o “De bueno para mejor” en nuestra lengua castellana, es la referencia elegida por la presente promoción 2009-II, en explícita alusión al valor vital de lo que puedes hacer para liderar tu vida, optimizando tu propia capacidad. Cada año, en mi calidad de profesor, Decano y ahora rector, he asistido a esta importante celebración, en la que entregamos, formalmente, el grado académico de bachiller de magíster y de doctor a una importante cantidad de profesionales. Siento una tremenda emoción y no puedo dejar de recordar, cuando yo, al igual que Uds. en este momento, me correspondió recibir este grado, ya hace muchos años atras…. En perspectiva, puedo señalar, desde mi propia experiencia, que los hombres vamos forjando nuestro destino, aunque no se pueda predecir: … ¿qué lugar va a ocupar cada uno de nosotros en este mundo?, … ¿qué nos depara el futuro?. Esto da una cuota de incertidumbre, que es sana, y colabora a hacer la vida más interesante. Quiero convidarlos, no a una despedida, sino a la más cordial bienvenida al mundo de la ingeniería y a la vida profesional, que les corresponderá cumplir, formalmente, a partir de hoy. Ciertamente, este momento solemne de graduación, de nuestros alumnos, es el resultado final de varios años de esfuerzo personal y familiar, que se ven recompensados con la obtención del grado académico respectivo. El que acredita que cada uno de ustedes se encuentra capacitado para desempeñarse, en el amplio mundo de la ingeniería, tanto en su aspecto profesional, como en otras áreas del desarrollo más especializado. Por ejemplo, podrán desempeñarse, como buenos innovadores; como líderes de equipos en variados proyectos; como administradores en empresas y creadores de nuevas organizaciones productivas; como servidores públicos en organizaciones sociales y dependencias del Estado; como investigadores, entre muchas otras posibilidades. Junto a lo anterior, espero, que generen riqueza, para que den empleo y opciones para muchos seres humanos, que hoy sueñan con días mejores. Que importante es la confianza! No olviden que es el fundamento o base de toda relación humana. Sin confianza, no hay amistad, no hay amor, no hay desarrollo. (pausa) Estimados nuevos graduados, el término de esta etapa formativa, significa también, el inicio de otra más importante que la anterior. En el sentido que, ahora deberán demostrar sus capacidades en el trabajo, y aportar a la sociedad, mejorando lo existente, creando nuevas formas de hacer las cosas: mas humanas y mas justas. Desarrollando nuevos productos, o aplicando eficientemente los conocimientos, adquiridos en su vida universitaria. Pero, confiamos, mantengan la humildad y el respeto para, y por los demás. La Universidad, los mantendrá informados sobre su quehacer, y les ofrece hoy, las posibilidades de continuar su desarrollo profesional y académico, “no les conviene olvidarse de su alma mater” Aquí también maduraron como personas y, probablemente, en muchos casos, concretaron compromisos laborales, y a algunos, como el mío, afectivos también. Muchos de ustedes, con la vocación que les conocemos, construirán en el futuro, otro gran proyecto, que los hará personas completas: la familia. Ese, es el gran proyecto de los seres humanos. El éxito en su vida personal, permítanme decirlo, será un éxito, que hará suyo también su universidad, porque la formación que hemos entregado, es una formación, cuyo objetivo final es posibilitar el desarrollo integral, donde Dios y el amor, no pueden estar ausentes. … La familia feliz, es la base para construir sociedades desarrolladas. Esto último, tiene que ver con la integridad como seres humanos, condición necesaria para ser un aporte real a la sociedad, en la que les tocará realizar diferentes funciones, y en las que deberán ser transformadores e innovadores, para hacer un espacio humano, más justo y desarrollado. En ustedes reside hoy, gran parte de esta responsabilidad. Tienen en sus manos las herramientas…. Sepan usarlas en aras de una vida mejor. Felicidades a ustedes, a sus familias y a todos aquellos que hicieron posible esta gran fiesta de graduación… Hoy, es el primer día, de una nueva vida. Hoy, dan el primer paso, como profesionales. Probablemente, sus nuevos proyectos de vida, comienzan a hacerse realidad hoy. Demos gracias a Dios por la obtención de esta importante meta y pidámosle su bendición. Sean humildes en el éxito, y generosos, en el amor al prójimo. Enseñando y ayudando. Perseverantes y optimistas, frente a los obstáculos. Enfrenten con coraje, los desafíos que les impondrá la vida. De esa forma, honraríamos el inolvidable legado dejado por el profesor molinero José María Arguedas, en la víspera de cumplir el centenario de su nacimiento el 2011, de crecer con inclusión, gestando el bien común. Siempre he dicho que los nuevos y antiguos alumnos son los pilares fundamentales de nuestra Universidad. Son y seguirán siendo parte de esta comunidad querida y entrañable. Por lo mismo, nunca olviden que la UNALM es y será vuestra casa, un lugar al que siempre pueden regresar y donde se les recibirá con respeto y cariño. A partir de este momento ustedes son parte de la orgullosa comparsa de los antiguos alumnos molineros, cuya naciente Asociación aguarda gustoso en incorporarlos y quiere estar justo en medio de vuestros corazones. Muchas gracias. La Molina, viernes 2 de julio del 2010. Dr. Jesús Abel Mejía Marcacuzco |