CONCLUSIONES

  1. El promedio del coeficiente de consanguinidad en la población fue de 0.04 %, valor que indica niveles adecuados y aceptables para este centro de conservación genética, sin embargo el mismo fue calculado con el promedio de generaciones máximas de sólo 1.33.
  2. El tamaño efectivo de la población fue de 124 ± 54, lo cual indica el número de  individuos que generaría la misma tasa de consanguinidad en la población actual si esta fuese ideal.
  3. Los intervalos de generacionales fueron de 5.2 y 5.68 años, edades que corresponden a la edad de los padres cuando nace su progenie seleccionada como de reemplazo y la edad de su progenie cuando nace toda su progenie, respectivamente.
  4. Los estimados de heredabilidad directa y materna para el peso vivo al nacimiento fueron de 0.04 ± 0.03 y 0.27 ± 0.03 respectivamente, y con una correlación genética entre la varianza genética aditiva directa  y la del efecto genético materno de 0.03 ± 0.24, indicando que el fenotipo para peso vivo no predice eficientemente el valor genético para este carácter y por otro lado la correlación indica que no existiría asociación entre estos efectos.
  5. La tendencia genética para el valor genético de peso vivo al nacimiento se mantiene estable  desde el año 1998 al año 2012, indicando la no selección a favor de dicha característica.

 

RECOMENDACIONES

  1. Continuar en el esfuerzo de mejorar el registro de datos de la población de alpacas, identificándolos por única vez al nacimiento, y en registros posteriores solo registrar el número de arete para evitar confusiones en la definición de colores u otras características.
  2. Monitorear constantemente los niveles de parentesco para evaluar la necesidad de incorporar nuevos individuos a la población, sobre todo en la población de alpacas de color con menor número de individuos.
  3. Profundizar la caracterización fenotípica y genética de la población del Banco de Germoplasma con otras características y usando marcadores moleculares.
  4. Utilizar los resultados como referencia para evaluar las tendencias genéticas de poblaciones selectas bajo mejora convencional, al menos en el ámbito de Puno.
  5. Documentar las decisiones que conlleven a la salida o introducción de animales del Banco de Germoplasma, basando las mismas en criterios que respalden el mantenimiento máximo de la diversidad genética de la población.